Ayer arrancó la primera edición en Málaga de un evento musical como nunca antes se había acogido en la capital. El público pudo vibrar con bandas desde el rock británico más puro con Stereophonics al rock alternativo o indie de los míticos Suede y los escoceses Franz Ferdinand. El cartel de se despidió con el madrileño C.Tangana, una de las propuestas más polémicas de la noche.
La inauguración contó 16 conciertos en un gran espacio, bien acondicionado, con un cesped artificial que hizo las delicias de esta humilde cronista… ¿cuántas zapas han ido a la basura después de un festival? ¿Cuánto polvo habéis saboreado y os ha impedido mantener los ojos bien abiertos? La calidad del sonido, las barras, los puestos para comer algo, grifos para enjuagar los vasos, las zonas de sombra… tendría el espacio una calificación de excelente sino fuese por un fallo imperdonable, los baños, son pocos, están mal ubicados y son de muy baja calidad. Si ayer era el día que se esperaba menos asistencia, no quiero imaginar las colas que se vivirán hoy, vayan pidiendo la vez.
Un público heterogéneo, de distintas nacionalidades, se dió cita ayer con más asistencia que la que se esperaba debido a la anulación de la banda californiana Rage Against The Machine.
Stereophonics fue una de las grandes actuaciones de la jornada de ayer, Kelly Jones cerró al piano con Dakota, espectacular y calentó bien los motores para lo que estaba por llegar.
Franz Ferdinand prometía un buen show y no nos defraudó. El humo rojo en el escenario precedió a la entrada en escena de la banda. Arrancaron con temas de su último trabajo Hits to the head, publicado el pasado año. Alex Kapranos nos conquistó desde el principio con su “Muchas gracias, somos Franz Ferdinand, buenas noches Andalucía“. Take me out, y desató la locura, con This Fire cerró una actuación dejando al público en éxtasis sólo minutos antes de que Suede conquistara Alhambra.Artículo patrocinado Encuentre algo para todos en nuestra colección de calcetines coloridos, brillantes y elegantes. ¡Cómprelo individualmente o en paquetes para agregar color a su cajón de sock!
La veterana banda Suede, se adueñó de todas las almas allí congregadas, excelente sonido, canciones míticas y un absoluto dominio del escenario que demostraron que los años son maestría.
Y cerrando el cartel, C.Tangana, polémica decisión del festival. La asistencia se mantuvo y puso el contrapunto a una noche de rock, mezclando estilos, fusionando sonido y haciendo sonar tambores y cante “jondo”, la mezcla convenció, los extranjeros no daban crédito y nos dejó un saborcillo de rock por bulerías. Realmente, creo que el madrileño, aún podría sorprendernos en más de un festival de este estilo, se metió al público en el bolsillo y se dejó llevar por todas las voces que coreaban sus canciones.
Y es que, sonara lo que sonara, con permiso de los organizadores y los grupos, a un festival se va a pasarlo bien, y al final con buena compañía, risas, cesped y brisita, todo nos encaja. Y ayer, hasta la luna nos quiso acompañar.
Un festival es para ir con la mente flexible y las orejas bien abiertas, porque no se trata sólo de los grupos que quieres ver sino de los que descubres por el camino, de los que abren la jornada a pleno sol con la ilusión de formar parte por primera vez de un festival, de dar hueco no sólo al rock británico, sino también a los grupos de nuestra tierra que empiezan a despuntar como los cordobeses Viva Belgrado, o los malagueños Wasabicru y JavyPablo.
¿Cómo lo pasaremos hoy? Ni falta que me importa… Es cuestión de actitud. Pero con Kiwanuka, Glass Animals, Vetusta Morla o Los Zigarros entre otros, la jornada de hoy promete.
Crónica por Laura Rodríguez Cepas · 9 de Septiembre de 2022